Como ya hemos visto este chakra está situado a la altura del plexo solar, en la conjunción de las vértebras dorsales y lumbares, a la altura de la boca del estómago.

Manipura es responsable a nivel físico de las funciones digestivas, la actividad del estómago, hígado, vesícula, bazo y páncreas. La energía calorífica que se produce durante el proceso digestivo es distribuida por los músculos esqueléticos, preparando así al cuerpo para la acción.

A nivel energético manipura es el encargado de materializar nuestros deseos terrenales, trasforma el alimento en calor, el cual vamos a usar para poner en marcha la actividad a desarrollar en el plano terrenal dentro del aspecto social.

Quiere decir que rige sobre el trabajo que vamos a realizar dentro de nuestra sociedad, ya que es gracias o debido a este como vamos a adquirir la energía necesaria para acceder al alimento que necesitamos, y que trasformaremos en nuestro sistema digestivo para generar nuevamente calor para seguir en acción.

En general el intercambio que realizamos en nuestra sociedad por el trabajo que realizamos es económico, así que este chakra rige sobre la gestión del dinero ya que es esta la fuente de energía con la que se nos paga por el trabajo realizado.

Un trabajo mal pagado, un exceso de esfuerzo, o trabajos realizados sin motivación pueden provocar bloqueos en este chakra produciendo emociones como la indignación, el enfado o la frustración.

Aquí es donde debemos valorar el trabajo que estamos realizando en nuestra sociedad y como se nos está pagando por ello, ya que en muchos casos la valoración personal pasa por una remuneración equitativa y que en todos los casos tiene que ser material (dinero, trueque, regalos).

Este es el chakra encargado de materializar nuestros deseos terrenales.

Asanas Yoga:

Todas aquellas que refuercen los músculos abdominales, y las lateralizaiones; postura de la traviesa o extensión lateral (parighasana), postura lateral sobre la pierna (parwrta janusirsasana). Respiración de fuego kapalabhati, Uddiyana Bhanda.

Ejercicios físicos:

• Reír hasta que duela el abdomen.
• Respiración de fuego: realiza series de varias respiraciones abdominales rápidas con el diafragma expandiendo y contrayendo el abdomen.
• Hacer jogging; adecuado para tonificar este chakra y quemar el exceso de energía.
• El leñador de pie; simula que tienes un hacha en las manos y golpea con fuerza hacia abajo descargando la energía del golpe en un tronco imaginario que tienes entre tus piernas; a la vez, y sin reprimirte, emite el sonido de liberación que desees.
• Abdominales en V tumbado boca arriba, procura juntar las puntas de los pies con las manos 15 veces seguidas.
• Giros de pie con los brazos estirados: estira los brazos y gira las caderas sobre la cintura a derecha e izquierda 10 veces hacia cada lado.

Ejercicios psíquicos:

• Rompe las rutinas e inercias que te estén bloqueando.
• Si tienes la sensación de opresión o de estar en un callejón sin salida haz algo para salir de él, muévete para romper la inercia.
• Cambia algún hábito que te aburra.
• Analiza tu vida desde el aspecto laboral objetivamente e introduce cambios en las situaciones en que te encuentres atrapado.

Activación:

• Una práctica muy potente que activa Manipura, es la de realizar captaciones de energía solar, dejando que los rayos del sol calienten nuestro abdomen. La luz del sol estimula el calor corporal. Aporta alegría y serenidad. Facilita la digestión, tanto física como psíquica y nos nutre, asimilando mejor las experiencias cotidianas.

Meditaciones:

• La luz dorada del sol se corresponde con la luz, el calor y la fuerza del chakra del plexo solar. Si te abres conscientemente a su influjo, se activarán en ti esas cualidades. La observación de un campo de colza o de cereal maduro y resplandeciente por el sol te transmite además la vivencia de la plenitud manifestada como resonancia provocada por el calor y la fuerza luminosa del sol.
• En el centro del girasol, en la unidad del círculo en movimiento, encuentras el patrón espiral móvil, y en los pétalos la luz amarilla que irradia hacia el exterior. Al imbuirte en el patrón de este mandala natural experimentas que en la vivencia interior de la unidad existen un movimiento y una actividad plenas de sentido, ordenadas y al mismo tiempo danzarinas, que irradian hacia el exterior con energía, alegría y al mismo tiempo con suavidad y absoluta belleza.
• Visualiza como los rayos del sol ubicado en el plexo solar se expanden en todas direcciones atrayendo hacia ti todos tus deseos materiales.